Eslovenia es un paraíso cuidado por la madre naturaleza. Montados en nuestra bici nos sorprenderán sus salinas, sus viñedos en las laderas, sus ríos serpenteantes, sus frondosos hayedos y sus interminables lagos que nos llevan hasta las costas del Mar Adriático. Un viaje en bicicleta en Eslovenia es una experiencia transformadora cuyo disfrute sublime se encuentra en la simplicidad de la naturaleza.